Bienvenido a este desafío que le hemos puesto por nombre “La Red.” Dios nos dio al palabra de Juan 21 para este reto porque muestra la realidad de muchos de nosotros.
Juan 21:3
“Simón Pedro les dijo: Voy a pescar. Ellos le dijeron: Vamos nosotros también contigo. Fueron, y entraron en una barca; y aquella noche no pescaron nada.”
A veces sentimos que llevamos tanto tiempo intentando pescar pero no vemos ningún resultado. Ningún discípulo, ninguna célula, y de cierta forma nos sentimos como los discípulos de Jesús se sintieron- frustrados. Me encanta lo que sucedió después en la historia
Juan 21:6
“El les dijo: Echad la red a la derecha de la barca, y hallaréis. Entonces la echaron, y ya no la podían sacar, por la gran cantidad de peces.”
La palabra de Jesús hace toda la diferencia. Cuando Jesús le dijo a Pedro VEN, pedro camino sobre la palabra que Jesús le dio. A veces pensamos que el camino sobre las aguas, pero en realidad el camino sobre la palabra. Salir a evangelizar sin la palabra da el resultado que estos discípulos tuvieron la primera noche. Cuando tenemos la palabra, no significa que no vamos a trabajar, sino que nuestro trabajo tendrá resultados SOBRENATURALES.
La palabra de Jesús a sus discípulos causó este resultado
Juan 21:11
“Subió Simón Pedro, y sacó la red a tierra, llena de grandes peces, ciento cincuenta y tres; y aun siendo tantos, la red no se rompió.”
La palabra de Jesús les dio:
1. Fruto abundante
2. Habilidad de retener el fruto
Esa es nuestra oración para este reto- fruto abundante pero también la habilidad sobrenatural de que la red no se rompa, y ningún pez se pierda.
Recuerda que estamos en tiempo de conquista y si hay UNA cosa que debemos cuidar y preocuparnos en este tiempo es por nuestros tiempo con Dios TODOS los días y aplicar la sangre que broto de la cabeza de Jesús por causa de la corona de espinas.
Vamos a conquistar nuestras 3 personas diarias si empezamos nuestros días de la manera correcta- a los pies de Jesús. Eso hizo la diferencia en los discípulos, el contacto que tuvieron con Jesús.
La Biblia nos habla de dos Mujeres que escogieron preocuparse por diferentes cosas. Una se preocupó más por él hacer (Marta) y la otra se preocupó por el oír (María). Cuando nos preocupamos por oír a diario, nuestro hacer será mas productivo.
Nos sentimos orgullosas de contar con personas tan comprometidas y apasionadas con Jesús!
Los amamos y bendecimos,
