Dios nos ha dado un tiempo para todo lo que queremos y necesitamos hacer en el día, en la semana, en el mes y el año. La vida equilibrada se basa en saber lo que se debe hacer y cuándo se debe hacer, para ello debemos establecer prioridades o puntos de referencia que trae orden a nuestra vida.
¿Cómo vivir una vida equilibrada? Nuestra vida puede verse como una serie de diferentes áreas que se refuerzan entre sí para lograr un balance. A menudo ocupamos la mayoría de nuestro tiempo en solo un par de ellas, restando importancia a las demás. Para vivir una vida equilibrada no solo basta con concentrarse en el trabajo, en el estudio o incluso en la recreación, es importante también nuestro llamado, nuestro cuerpo y nuestra vida espiritual.
Vivimos en un mundo acelerado, agitado y con una sobredosis de información y estimulación. A veces podemos vernos absorbidos, dedicando todo nuestro tiempo a una sola área. Así como una planta para crecer necesita agua, luz solar, tierra fértil y un clima adecuado, también nuestra vida requiere de nuestra total atención. Por esto es importante asegurarnos que todo esté en su lugar, esto traerá rendimiento. “La clave es saber administrar el tiempo”.
1. EL NÚMERO UNO DEBE SER DIOS
Dios anhela ocupar el lugar más importante en su vida, si Él está en el lugar correcto como número uno, todo lo demás estará en el lugar adecuado.
2. SU VIDA ES MUY IMPORTANTE
Cuidar su cuerpo debe ser considerado como prioridad, actividades como una caminata de 15 minutos diarios, practicar a menudo un ejercicio o mantener una dieta saludable, con seguridad creará emociones y pensamientos más saludables.
3. LA FAMILIA DEBE SER MODELO
La familia debe ser ejemplar, es importante que todo esté en orden al interior del hogar. En especial, el hombre, como sacerdote y autoridad, debe amar, cuidar, proteger y proveer para su esposa e hijos, de esta manera dará honor a Dios.
4. DESARROLLAR EL MINISTERIO
Dios nos lo llamado a Su servicio, Él quiere que sea instrumento para llevar salvación. Desarrollar el ministerio, requiere disposición y compromiso.
5. EL TRABAJO Y EL DIARIO VIVIR
La clave es hacer del trabajo algo importante pero no la fuente de provisión, el trabajo no ocupa el primer lugar porque entendemos de dónde viene la fuente de nuestra bendición.
Una vida equilibrada y balanceada equivale a una vida feliz, en armonía y plenitud. Pero ¿cómo empezar a hacerlo real en todas las áreas de su vida?
- Realice una lista de actividades que deba ejecutar y a cada una asigne el tiempo que crea que se necesite para desarrollarlas.
- Programe estas actividades en su agenda de la semana.
- Empiece una actividad hoy.
- Identifique aquellos malos hábitos están dañando el balance de todas las áreas de su vida.
“En este mundo todo tiene su hora; hay un momento para todo cuanto ocurre” Eclesiastés 3:1 DHH
Pastor MCI Bogotá · Alain Alonso
